El Nuevo Día-
Hace varios años vivimos en una crisis económica muy grande que nos tiene preocupados, tratando de sobrevivir cada día.
Mientras, el gobierno de Puerto Rico dice que tenemos que recortar gastos innecesarios y todos tenemos que aportar a combatir la crisis, que hay que sacrificarse. Lo primero que hicieron fue una Reforma Laboral tanto en el área privada, como en la gubernamental. Te dejaron con un bono reducido, te eliminaron días de vacaciones, enfermedad, te eliminaron otros derechos en leyes como despido injustificado, el derecho a cobrar algunas horas extras y en el gobierno te pueden transferir de agencias sin preguntarte.
Te dicen que hay que sacrificarse en el área de salud donde la cubierta de la reforma será reducida, serán menos los medicamentos que tendrás derecho a recibir. En la educación pública te van a aumentar la matrícula de las universidades del estado mientras tendrás menos cursos.
Tienes que sacrificar tu vehículo porque no hay dinero para arreglar las carreteras, tienes que sacrificarte sufriendo apagones porque no hay dinero para mantenimiento a la Autoridad de Energía Eléctrica.
El empleo público va a sufrir porque serán vendidas varias agencias de gobierno bajo Alianzas Público Privadas (APP) y la Junta ha pedido que el empleado se sacrifique rebajando la jornada de trabajo.
Ya sabemos que prácticamente a todos los miembros del gabinete les subieron el sueldo. La Sra. Julia Keleher gana $250,000 como secretaria de Educación. A Héctor Pesquera se le pagará $248,000 al año como secretario de Seguridad Pública. El secretario de la Gobernación se gana $14,000 dólares mensuales.
La Junta de Supervisión Fiscal no se queda atrás otorgándole un contrato de $625,000 a Natalie Jaresko para ser su directora ejecutiva. El costo de esa Junta es de más de $60 millones.
Supimos que Norma Burgos puso a sus hijos a ganar un dineral con trabajo en la Comisión Estatal de Elecciones y también a sus nueras.
A los que te brindan servicios, los municipios les están esquilmando, se les han apropiado ilegalmente de dinero depositado en el Banco Gubernamental de Fomento. Les están restando ayudas y presupuesto. Los dejan en una posición que su única salvación será subirte el impuesto sobre la propiedad y las patentes municipales.
Sin embargo, no hemos visto que a la banca, las compañías transnacionales ni a las grandes industrias les pidan que hagan el mismo sacrificio que a ti.
Si analizamos la forma de pensar del gobierno de Puerto Rico y de la Junta de Supervisión Fiscal de que hay que recortar los gastos innecesarios que nos llevaron a la crisis, y vemos los pasos que se han seguido para combatirla, solo tenemos un resultado. ¡La culpa de la crisis la tienes tú!
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