Compañeros (a):
De acuerdo a la vieja tradición sería función del Secretario General el tratar de disuadir a un gran número de ustedes, de aspirar a una candidatura bajo la insignia de este glorioso movimiento de pueblo en las próximas elecciones generales. No comparto esa visión, excepto en casos de extrema necesidad y por el bien de la familia Popular
Cada uno (a) de ustedes es responsable ante su conciencia, familia y seguidores de las consecuencias de su aspiración. Pero también recordemos que sus acciones también han de incidir sobre el futuro del Partido Popular Democrático y del país. Por eso, en este momento tan importante en que expresan su intención de aspirar a ocupar una posición en la papeleta de este movimiento de pueblo, les invito a la más seria reflexión de todo lo que implica su aspiración, no sólo para el seno más íntimo de cada uno (a), sino en el de un país que pide a gritos el auxilio de su mejor recurso y de su probado instrumento de cambio y revolución pacífica, el Partido Popular Democrático. Por esa razón confío en que entiendan que serán rigurosamente evaluados por la Comisión Calificadora y suplico su cooperación para lograr agilizar el proceso. En todo ese proceso de reflexión, estaremos disponibles para asistirles.
Recordemos. Hoy más que nunca, este proceso reviste un significado especial. Durante tres años hemos vivido la desesperanza y la insensibilidad producto del junte de la avaricia y la incompetencia. La oferta del Partido Popular Democrático al país tiene que ser fruto de la unión del mejor y más íntegro talento; de la sensibilidad y del profundo compromiso con el pueblo y la Patria. Se sirve al pueblo y a la Patria desde múltiples trincheras; tanto desde la tribuna como desde el anonimato. Se sirve al pueblo y a la Patria primero siendo hombres y mujeres de buena voluntad. Se sirve al pueblo y a la Patria enfrentando el proceso con honestidad y desprendimiento.
¡Qué viva el Partido Popular Democrático! ¡Que viva Puerto Rico!
José Ariel Nazario Álvarez
Secretario General